sábado, 28 de abril de 2012

ESTA EN MARCHA EL PROCESO DE CREACIÓN DE LA MIEL DE BIERZO EN LA PROVINCIA DE LEÓN

Los apicultores confían a Agroinforma el estudio para crear el sello de calidad El proceso para crear un sello de calidad de la miel del Bierzo está en marcha y pronto se conocerán las primeras conclusiones de los estudios que la Asociación Leonesa de Apicultores ha promovido a fin de conocer exactamente cuál es la situación del sector en la comarca. Finalmente, será la empresa Agroinforma, con sede en la capital de provincia, la encargada de llevar a efecto el proyecto de análisis y determinar si la miel de la comarca cumple con los parámetros legales para ser comercializada. Así lo aseguró, en declaraciones a Diario de León, el presidente de la asociación en el Bierzo, Antonio López, quien adelantó, que la misma empresa está elaborando ya un estudio particular para determinar cuántos colmenares hay ahora mismo abandonados —constituyendo un peligroso foco de infecciones para el resto—, qué posibilidades tiene el sector a nivel económico y con qué margen cuentan para poder implantar nuevas colmenas y realizar cursos formativos de cara a nuevos apicultores. «Todo ello se conocerá en breve», garantizó. Nuevos colmenares Aunque de momento es pronto para hablar de datos, el presidente de la Asociación Leonesa de Apicultores confía en poder instalar alrededor de un centenar de nuevos colmenares que permitirían incrementar considerablemente una producción que en el Bierzo se estima que es de unos 25 kilos de miel por colmena. Cantidad que, no obstante, ha caído en los últimos años como consecuencia de las enfermedades que afectan a las abejas. Según los últimos datos de la Asociación Berciana de Apicultores, el año pasado fueron algo menos de 34.000 los kilos recogidos en colmenas aseguradas adscritas a este colectivo. Es la Junta de Castilla y León quien tiene que reconocer la miel del Bierzo como un producto de calidad suficiente para ser identificado con etiqueta, al mismo nivel que los seis marchamos que ya existen. Pero hasta conocer la resolución de la Administración autonómica el camino es arduo. De hecho, los productores de miel del Bierzo estiman que puede tardarse hasta tres años en realizar los análisis y los estudios en los colmenares de todos los apicultores que se adhieran al proyecto y que, por el momento, pueden ser alrededor de 200 —una vez se fusiones las asociaciones berciana y leonesa—. «Hay que pasar los controles de sanidad para poder salir al mercado, como cualquier producto alimenticio», recordó Antonio López, aprovechando la coyuntura para expresar que la mejor forma de garantizar la salubridad y calidad de la miel es adherirse a la asociación, ya que ellos se encargan de realizar los controles y garantizar, gracias a su servicio veterinario, que la salud de las abejas es la correcta. gg Encuentro de apicultores, en mayo. El presidente berciano de la Asociación Leonesa de Apicultores está convencido de que la apicultura puede ser una salida económica importante, un sector con capacidad suficiente para generar ingresos. De momento, el día 5 de mayo tendrá lugar un encuentro de productores en el que se analizará el estudio que está en marcha, ya con algunas conclusiones sobre la mesa. Será en la sede de la Fundación Ciudad de la Energía.

Ecologistas y apicultores llevan las fumigaciones aéreas a la Fiscalía

os denunciantes advierten que el uso de un tratamiento para acabar con una enfermedad del eucalipto contaminará el suelo y provocará la muerte de las larvas de las abejas La oposición de ecologistas, agricultores y apicultores llevará las fumigaciones aéreas en plantaciones de eucalipto ante la Fiscalía de Medio Ambiente. La Asociación Galega de Apicultura, el Sindicato Labrego Galego, La Federación Rural Galega, Adega, Verdegaia y la Asociación Véspera de Nada acaban de presentar ante el ministerio fiscal una denuncia contra el uso de un insecticida químico que contiene flufenoxurom, un principio activo que actualmente se encuentra en moratoria en la Unión Europea y que en agosto dejará de venderse debido a su toxicidad. El tratamiento, promovido por la Asociación Española de Fabricantes de Pasta, Papel y Cartón y comercializado como Cascade, se usa contra el gorgojo, un insecto que impide el crecimiento del árbol. La Xunta autoriza las dosis y su fumigación, aún sin fecha, y los ayuntamientos y la Asociación Forestal de Galicia colaboran en su aplicación. “Las fumigaciones de químicos tóxicos desde helicópteros y avionetas no solo afectarán a los insectos tratados sino que contaminarán el suelo, acuíferos y las fincas vecinas”, recoge la denuncia. El documento advierte también de los efectos del insecticida sobre las larvas de la abeja y los organismos acuáticos. “El riesgo de desaparición de las abejas es real. Provincias como Pontevedra y A Coruña han perdido el 60% de sus colmenas en los últimos años”, critica Xesús Asorey, portavoz de la Plataforma contra as fumigacións, formada por ecologistas, ganaderos, labradores y apicultores de toda Galicia. En Porto do Son, el colectivo logró que ningún vecino autorizase la aplicación del producto en sus montes. La plataforma presentará hoy un manifiesto y el día 29 realizará una acción reivindicativa en la feria de Melide Los denunciantes calculan que el temible gorgojo, que avanza favorecido por el monocultivo, afecta a unas 100.000 hectáreas de eucaliptal, una cuarta parte del existente en Galicia.

PREOCUPA LA VESPA VELUTINA EN GIPUZCOA EN EL PAIS VASCO

Las trampas de Bittor Murgiondo han capturado hasta ahora un total de siete avispas reina. Los apicultores se mantienen en guardia ante la llegada de la avispa invasora asiática La temible avispa invasora asiática ya está aquí. Su presencia en el Alto Deba se constató el año pasado con la retirada de sendos nidos en Oñati y Arrasate. Eran los primeros signos de una invasión en ciernes que se teme que podría completarse durante la recién iniciada campaña apícola. Los productores de miel afrontan con honda preocupación una nueva temporada en que la formidable amenaza de la vespa velutina se añade a los azotes ocasionados en las colmenas por las enfermedades comunes, las plagas y el hambre. Con la llegada de la primavera las abejas se desperezan de su hibernación y las colmenas reanudan su laboriosa actividad. Pero también vuelven a la vida las avispas asiáticas devoradoras de abejas. Y se despiertan con hambre. Bittor Murgiondo, mutiloarra largamente afincado en Arrasate, es un apicultor veterano y precavido. Ha rodeado de trampas contra avispas el colmenar que cuida en Musakola. Siete avispas reinas El resultado de su barrera anti-avispas no podría ser más inquietante: en los cinco butrones confeccionados con botellas de plástico y cebados con cerveza, vino blanco y sirope de arándanos, han caído ya nada menos que siete avispas reina. Las reinas de la vespa velutina «hibernan bajo tierra y en huecos de troncos, y con la primavera afloran a la superficie para alimentarse y construir un nido» explicaba Murgiondo. Las reinas-fundadoras que han sorteado las trampas de los apicultores se hallan ahora mismo -entre abril y mayo- construyendo su nido y realizando la primera puesta de huevos. Avanzado el verano, la nueva colonia puede llegar a sumar «más de diez mil individuos». Así pues, la buena 'caza' efectuada por las trampas instaladas por Murgiondo ha frustrado la eventual construcción de siete nidos que podrían cobijar a un ejército de decenas de miles de avispas 'asesinas'. La voracidad de este insecto, aseguraba Murgiondo, es prodigiosa: «unas decenas de estas avispas, que triplican en tamaño a la abeja melera, pueden acabar con una colmena de 30.000 individuos en una semana». Su 'técnica' consiste en «apostarse a la entrada de la colmena y matar a las abejas arrancándoles la cabeza y la tripa donde ocultan el aguijón para llevarse el cuerpo y devorarlo en el nido». Las abejas, pese a ser extremadamente celosas y agresivas en la defensa de su colonia, carecen aún de una táctica efectiva para neutralizar a estas avispas, ante las que sucumben también en el aire. La abeja, con sus 20 kilómetros por hora en vuelo, no es rival para esta depredadora aérea que se lanza sobre ella a 60 kilómetros por hora, apuntaba Murgiondo. Desde que en 2005 desembarcaran en Burdeos los primeros ejemplares de avispa velutina ocultas en un carguero procedente de China, la amenaza de este agresivo insecto devorador de abejas se ha ido extendiendo de forma imparable. «Sólo en 2011 los ataques de estas avispas acabaron con más de un millar de colmenas en Gipuzkoa» señalaba Murgiondo. Los apicultores del Alto Deba se mantienen expectantes ante una amenaza cuya materialización aguardan con evidente temor. La avispa invasora ha causado estragos en las comarcas costeras, Buruntza y Donostialdea. Debagoiena se mantiene aún relativamente indemne. «Lo peor está por llegar» vaticinaba Murgiondo. José Luis Azpeitia, oñatiarra afincado en Arrasate y propietario de un colmenar en el barrio bergarés de Elorregi (San Prudencio) aseguraba «no haber conocido aún a la avispa asiática». También él se ha provisto de las trampas-butrón pero no se ha visto en la necesidad de colocarlas en torno a sus colmenas. Quizá el aislamiento de que goza en el recóndito caserío Abeletxe ha contribuido a preservar a sus colmenas de la invasión de la avispa 'asesina'. A la espera de lo que pueda deparar el futuro, Azpeitia continúa cuidando con mimo a sus abejas, de las que obtiene una estupenda miel milflores con la que ha obtenido seis galardones. Hambre Al igual que él, el también oñatiarra Fernando Lizarralde asegura no haber acusado aún los efectos de la vespa velutina. Este apicultor txantxikuarra se dedicó años atrás profesionalmente a la producción de miel. Llegó a poseer hasta 400 colmenas de las que extraía entre 3 y 5 toneladas del mil al año, e incluso 7 obtuvo en un año extraordinario. Ahora se conforma con cuidar las 70 colmenas que mantiene en Gabiria. Sin pretender restar importancia al peligro que representa la vespa velutina, este experimentado apicultor apuntaba que hoy por hoy el 'enemigo número 1' de las abejas «es el hambre». Incluso más allá de las enfermedades o las plagas. «Una vez de 'sanfermines' apenas queda alimento para las abejas en nuestros campos y montes» se quejaba Lizarralde. La brevedad de la floración local y la progresiva transformación del medio natural brindan cada menos alimento disponibles para las abejas. Los monocultivos de pino insignis han reemplazado a las variedades forestales y frutales autóctonas, y los silos están acabando con los praderas donde antes la hierba segada se secaba al sol. Las tardías flores de los castaños que poblaban nuestros bosques son poco más que un recuerdo, y de no ser por la práctica de la trashumancia Lizarralde no hubiera podido sacar adelante sus cientos de colmenas. «Después de 'sanfermines' solíamos trasladar las colmenas a Navarra o a Burgos hasta octubre o noviembre, en que las traíamos de vuelta para invernar». El veterano apicultor oñatiarra no dudaba en atribuir al hambre debida a la falta de suficientes reservas de miel, la causa de muerte de muchas colmenas durante el invierno. Ante esta situación, muchos productores no tienen más remedio de 'alimentar' la colmena con suplementos de azúcar, lo que hace que se resienta la calidad de la miel. Con respecto al temor que suscita la amenaza de la avispa asiática, Lizarralde opinaba que las trampas-butrón empleadas por muchos apicultores «constituyen tan sólo un chivato, pero no una solución al problema». La querencia de la avispa por los azúcares de la uva lleva a los apicultores como Lizarralde a desear que «ojalá que este insecto acabe con toda la cosecha de txakoli, porque entonces, debido a los cuantiosos intereses económicos que mueve esta industria, seguro que las administraciones hallan alguna feromona o solución para erradicar esta plaga». El temor a la irrupción de la temible avispa asiática no interrumpe la milenaria tradición de la elaboración de miel. Históricamente, prácticamente cada caserío disponía de colmenas para el suministro del dulce natural por antonomasia, la miel. Un alimento nutritivo y altamente energético, digestivo y al que se atribuyen propiedades curativas como antiséptico, fortificante, calmante, laxante, diurético y bactericida, entre otras beneficios terapéuticos.

Apicultores gallegos temen que la fumigación de eucaliptos provoque la muerte de abejas

La Asociación Galega de Apicultura (AGA) está movilizándose contra las fumigaciones de eucaliptos que los silvicultores solicitan con el fin de combatir el goniptero que defolia extensas zonas de plantaciones. El tratamiento químico puede solicitarse a la Asociación Española de Fabricantes de Pasta, Papel y Cartón (Aspapel) y complementa la lucha biológica contra el insecto que realizará la Consellería do Medio Rural. Colocará 10.000 bolsas de ootecas del parásito Anaphes nitens en lugares con la plaga. Los apicultores aseguran que el químico flufenoxurón, base del insecticida Cascade de BASF, es responsable de la intoxicación y muerte de abejas, y el colapso de las colmenas. Las abejas se desorientan y no regresan. Jesús Asorey, secretario de AGA, precisa que su principio activo ya recibió la «no autorización» de la UE, prohibiendo usarlo a partir del 2013, con la recomendación de retirarlo antes. Una orden comunitaria del 22 de septiembre sobre comercialización de productos fitosanitarios indica acerca del flufenoxurón que «tiene un alto potencial de acumulación en la cadena alimentaria» y «elevado riesgo para los organismos acuáticos». También es tóxico para la larva de abeja. Los apicultores rechazan que en áreas y épocas de actividad de las abejas se fumigue el goniptero del eucalipto, que suele hacerse con medios mecánicos o con avionetas; de noche, o a primeras horas del día. «O flufenoxurón non é inocuo e encima lanzalo ao aire afectaría non só ás abellas, senón ás persoas», dice Asorey, quien refiere importantes mortandades de abejas durante el pasado invierno, por ejemplo, en el entorno de Santiago, que pudo ser por uso de neurotóxicos en huertas. Sobre las pérdidas en Celanova, sospechan de fumigaciones frente a la pulguiña del carballo.

lunes, 16 de abril de 2012

El IES Galileo Galilei promueve el sector apícola

Los pasados días 26 y 27 de marzo se celebraron, en el IES Galileo Galilei, de la capital cordobesa, las primeras jornadas de puertas abiertas para promocionar el sector apícola entre los alumnos de Educación Secundaria del centro. Estas jornadas se enmarcan dentro del Proyecto de Innovación Educativa en la FP Oportunidades de Empleo, Innovación y Nuevas Tecnologías en el Sector Apícola , que se lleva a cabo entre tres centros del panorama nacional. El proyecto, promovido y coordinado por profesores de la Familia Profesional Agraria del IES Galileo Galilei, y en el que colabora la Diputación Provincial de Córdoba a través del convenio que tiene suscrito con la Consejería de Educación de la Junta de Andalucía, busca sensibilizar a alumnos de Educación Secundaria y de Formación Profesional sobre los beneficios medioambientales de la apicultura, así como presentar al sector apícola como prototipo de desarrollo sostenible con importantes oportunidades de empleo, de especial interés en el momento económico que atravesamos en la actualidad. Los alumnos cordobeses han participado en las jornadas realizadas en las instalaciones del Centro Agropecuario de la Diputación, en las que la empresa Apoidea ha llevado a cabo distintas actividades, dando a conocer el mundo de las abejas y su importante función en la conservación del medio ambiente. Las actividades culminaron con una visita a las colmenas, donde los alumnos participantes y sus profesores, completamente equipados, pudieron acercarse y observar asombrados la fascinante vida de las abejas.

Las benditas ánimas, propietarias en Anta

ARACELI SAAVEDRA La citación a las Benditas Ánimas en un expediente administrativo municipal puede sonar a error o broma. Pero no es así. El Ayuntamiento de Rosinos de la Requejada emplaza a las Benditas Ánimas de Anta de Rioconejos a consultas. La alcaldía inició un expediente para autorizar una explotación apícola trashumante en dos parcelas de Anta de Rioconejos. Se abre el periodo de información pública y se practica la notificación a los linderos. Es aquí donde surge la anécdota. Diez propietarios figuran en la relación catastral del año 50, entre ellos las Benditas Ánimas. Y aparece el dilema. Oficialmente y por el catastro, es uno de los propietarios. La última revisión de los titulares de las fincas de rústica en este ayuntamiento es de 2005, fecha en que los propietarios actualizaron el registro. Los dueños de las fincas del anejo de Anta de Rioconejos se quedaron sin hacer esa actualización, de ahí que aunque la finca haya cambiado de propietario, la relación que se consulta es la del catastro anterior a la modificación. La Ley de Régimen Jurídico y del Procedimiento Administrativo establece que deben figurar los titulares, y así se ha hecho. Incluso aquellos que aparecen con datos incompletos, como también se constata en la relación de propietarios. Lo más posible es que este finca que pertenecían, bien a la Cofradía o bien a la Iglesia, y se hubiera vendido pero no se procediera en su momento a la actualización de los datos. Lo más certero es que la finca perteneciera a la Cofradía de las Benditas Ánimas de Anta de Rioconejos, porque la cofradía existió y existe porque no consta su disolución. Lo que no quedan son cofrades y en todo caso son los herederos. Para entrar en la cofradía «se pagaba una cantidad de cera para formar parte de ella», explica una vecina de la localidad. Esta agrupación no tiene en estos momentos actividad alguna, como buena parte de las cofradías que existieron en la comarca pero sí conserva una relación de propiedades. Una de las vecinas de Anta, María Godoleva Martino, recuerda de niña que la Cofradía disponía de tierras, no muchas pero sí tenía algunas. El día de Jueves Santo «acudíamos, con nuestros padres, a rezar a una casa y nos daban un panico. Volvíamos muy contentas para casa con ese pan». Los cofrades pagaban «un tanto al año», unos pocos reales o pesetas. La Cofradía conservaba las andas para trasladar a los difuntos y mantenía la obligación de enterrarlos. Precisamente esa generación, la de los abuelos, es la que mantuvo la cofradía, hasta que el tiempo la disolvió en tiempos ya de los nietos.

El “oro dulce” busca su supervivencia frente a las plagas

La miel de Galicia es un producto de calidad y si es de carballo o brezo, la más común en Ourense, su riqueza en vitaminas está garantizada. Un estudio realizado por la Universidade de Vigo en colaboración con el Consejo Regulador Indicación Geográfica Protegida Mel de Galicia destaca el alto contenido en minerales y vitaminas de este producto, mayor que el registrado en la miel de otras zonas de España. Así lo ha explicado recientemente la profesora Carmen Seijo, en el que se ha determinado, a través de unas 200 muestras de miel analizadas durante tres años, la composición nutricional de este producto en Galicia, así como algunas de sus características definitorias. El objetivo de este estudio, realizado en colaboración con la Consellería de Medio Rural, el Ministerio de Medio Ambiente y la Universidade de Vigo, es poner de manifiesto las especiales características de la miel gallega, algo esencial para el etiquetado de este producto con denominación de origen. Según ha destacado Carmen Seijo, tras las muestras analizadas se deduce que la miel gallega tiene un alto contenido en minerales y vitamina c, superior a la miel de otras regiones, especialmente de fósforo, potasio, calcio y magnesio. Asimismo, cuentan con antioxidantes como polifenoles o flavonoides. Además, se ha evidenciado que, en función de la procedencia botánica de la miel, existen diferencias a nivel nutricional. Por ejemplo, la miel de brezo, de silva o de castaño -la más común en la provincia de Ourense, una de las mayores productoras de miel junto con Lugo- son las de mayor contenido en elementos minerales como el potasio, el magnesio o el calcio. Por su parte, la miel de castaña presenta un mayor contenido en vitamina C. Con los datos de este estudio se puso en marcha la campaña 'La miel: oro dulce de la naturaleza', por parte del Consejo Regulador, para evidenciar las ventajas de este producto y describir sus características. Precisamente, el futuro de la producción y de la calidad estaría en juego en algunas comarcas como la de Melide si se opta por la utilización de un determinado pesticida para combatir una plaga de los eucaliptos, según ha advertido la Asociación Galega de Apicultores (AGA). Uno de sus responsables, Xesús Asorey, alerta del peligro que supondrá para las colmenas, especialmente en una época, ésta, en la que la actividad de las abejas es máxima, pudiendo generar una 'catástrofe económica y ecológica' tanto en esa comarca como en otras limítrofes. Asorey, que ha recalcado el trabajo de la Asociación en defensa de las colmenas y de esta actividad como elemento de producción económica en el campo ourensano y gallego, señala que en la actualidad AGA está centrada en la exploración de todos los campos que conforman este variado y complejo mundo apícola. 'Baixo a denominación de “apicultura multifuncional” estamos asistindo a un renacer da actividade apícola a escala mundial, situando as abellas e os abelleiros no centro da conservación da biodiversidade debido ao efecto polinizador das nosas abellas', de ahí la necesidad de proteger el sector. Tiempo estimado de lectura: 2 min 30 seg Comentarios: 0 Imprimir el artículo Agregar a favoritos Descargar en PDF Enviar por correo Texto normal Texto grande

Asaja-Almería denuncia una oleada en robos de colmenas en la provincia

La Asociación de Jóvenes Agricultores de Almería advierte de una oleada de robos que se está produciendo en el último mes en las explotaciones apícolas de la provincia. «La escasez de lluvias ha provocado una disminución en el número de colmenas disponibles, lo que se traducirá en una bajada importante de miel y polen para este año, situación incomoda para los colmeneros que verán bajar sus ingresos por estos conceptos, incluso pudiendo llegar a perderlo todo en el caso de ser víctima de los robos de colmenas», explica Francisco Vargas, presidente de Asaja-Almería. En cambio, añade, «para aquellos que son amigos de lo ajeno ven en esta dificultad una oportunidad para incrementar los ingresos propios, situación que hace permanecer en alerta a todos los propietarios de explotaciones apícolas de nuestra provincia». En Almería existen más de 250 explotaciones apícolas profesionales y casi 900 explotaciones no profesionales, que a su vez entre ambas, tienen más de 140.000 colmenas que pueden llegar a producir más de dos millones de kilos de miel. Otro ejemplo de la utilización de las colmenas es para llevar a cabo la polinización en cultivos como sandía y melón de la provincia utilizándose una media de seis colmenas por hectárea y semana para tal fin. Otra de las preocupaciones de los productores apícolas es el robo de enjambres aunque, aclara Vargas, «aquí es mas difícil de demostrar ya que no desaparece la colmena sino que se llevan una parte de la población con una nueva reina que formara su propia colmena en otro cajón». Al problema de los robos de colmenas y enjambres hay que añadir la disminución de enjambres en años de sequía, lo que sin duda supone otra perdida económica importante para el apicultor. De esta forma, se explica que ante la creciente necesidad de colmenas, «los especuladores de lo ajeno incrementen la oleada de robos en nuestra provincia, que además, también se están produciendo en otras provincias limítrofes como Granada o Murcia», apunta Francisco Vargas. Asaja insiste en la importancia de presentar denuncias para que las autoridades tengan conocimiento de la situación real en la que nos encontramos.